Ante el aumento sin precedentes de ataques de osos en Japón, el Gobierno y autoridades locales otorgan subsidios para la caza, mientras se registran 167 ataques y la cifra anual más alta de heridos por estos animales.
Japón se enfrenta a una preocupante oleada de ataques de osos, con 167 casos en lo que va de año, resultando en cinco muertes. El incremento en octubre ha llevado a las autoridades a ofrecer incentivos económicos para la caza de osos, especialmente en las regiones del norte del país.
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El ministro de Medio Ambiente, Shintaro Ito, anunció que el Gobierno cubrirá los gastos de rastreo y caza de osos, mientras se aconseja al público mantener una distancia segura y llevar espráis para ahuyentar a los animales. Además, el gobernador de Akita ofrecerá incentivos de 5,000 yenes a los cazadores por cada oso abatido, una medida inusual en respuesta a la creciente amenaza.