Un logro histórico basado en la gestión sostenible y la ciencia aplicada
La caza de la tórtola europea será nuevamente autorizada en España a partir de la temporada 2025/26, después de haber estado en moratoria desde 2021. Este hito se ha conseguido gracias al esfuerzo de cazadores, administraciones, federaciones y organizaciones del sector, que han trabajado en la recuperación de la especie mediante la gestión de hábitats y un control riguroso de capturas.

El comité NADEG, órgano experto de la Comisión Europea, ha reconocido el compromiso de España, destacando su papel en la monitorización, regulación de capturas y mejora del hábitat, lo que ha permitido alcanzar el 30 % exigido en conservación. Como resultado, se ha aprobado una tasa de captura sostenible del 1,5 %, lo que significa que la caza podrá retomarse bajo estrictos controles.
Uno de los proyectos clave ha sido el Plan Integral de Recuperación de la Tórtola Europea en Extremadura (PIRTE), impulsado por la Fundación Artemisan con el apoyo de la Federación Extremeña de Caza y la Junta de Extremadura. Desde 2019, este programa ha sido clave en la recuperación de la especie, implicando a los cazadores en la monitorización de poblaciones y en la gestión activa de los cotos para mejorar el hábitat.
Además, el Precinto Digital de Caza, desarrollado en colaboración con el Ministerio de Agricultura, ha sido determinante para garantizar un control fiable de las capturas. Este sistema ha permitido demostrar ante la Unión Europea la viabilidad de una caza sostenible y regulada.
El Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación (MAPA) ha establecido una estrategia nacional para garantizar que la caza de la tórtola se realice bajo criterios científicos y sostenibles. Se fijará un máximo de cuatro días hábiles de caza por temporada, con medidas de vigilancia y precintado obligatorio en todas las Comunidades Autónomas.
La Real Federación Española de Caza (RFEC) ha instado al MAPA a coordinar a los gobiernos autonómicos para que adapten sus planes regionales en marzo, consolidando así este gran logro para el sector cinegético. La recuperación de la caza de la tórtola es un ejemplo de cómo la gestión sostenible y la ciencia aplicada pueden ser aliadas de la actividad cinegética y de la conservación.