El número de accidentes causados por animales en las carreteras de Salamanca ha aumentado dramáticamente en la última década, con un notable incremento en los incidentes con corzos y jabalíes.
En los últimos años, Salamanca ha visto un aumento significativo en los accidentes de tráfico causados por fauna salvaje, particularmente por corzos y jabalíes. Mientras que hace una década los corzos apenas figuraban entre los animales responsables de accidentes, hoy en día se sitúan en segundo lugar tras los jabalíes. De enero a julio de este año, se registraron 97 accidentes con corzos, lo que triplica el número total de incidentes del año 2015.
El incremento en la población de corzos, especialmente en zonas de cultivo despejado, ha contribuido a esta tendencia. Además, los jabalíes continúan siendo los principales culpables de los accidentes en carretera, con 191 incidentes reportados en los primeros siete meses del año, representando más de la mitad del total de 316 accidentes. Aunque el balance de accidentes con jabalíes ha disminuido ligeramente en comparación con el año pasado, estos siguen siendo los animales más peligrosos debido a su gran tamaño, lo que también incrementa los costes económicos de los siniestros, que pueden llegar a los 2.850 euros en daños.
Las autovías no están exentas de estos peligros, con 31 accidentes reportados entre enero y julio en estas vías de alta velocidad. La A-66 y la A-62 destacan por tener un alto número de incidentes, lo que ha llevado a la instalación de señales de advertencia específicas para prevenir a los conductores. Los expertos advierten que la tendencia podría seguir en aumento, especialmente en los meses de otoño, cuando la actividad de la fauna y el tráfico coinciden en mayor medida, aumentando así el riesgo de colisiones.